Si la maltratas a ella, me maltratas a mí

¿Qué es la violencia de género?

La violencia de género se ha constituido como un fenómeno invisible durante décadas, y es una de las manifestaciones más claras de la desigualdad, subordinación y relación de poder de los hombres sobre las mujeres.

De hecho, ya en 1980, la II Conferencia Mundial sobre la Condición Jurídica y Social de la Mujer, establecía que la violencia contra las mujeres supone el crimen más silenciado del mundo.

Trece años después, la Conferencia Mundial de Derechos Humanos de Viena, supuso el reconocimiento de las mujeres como Derechos Humanos.

También, la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (CEDAW), en su recomendación general nº 19, afirmaba, en 1993, que la violencia contra la mujer es «una forma de discriminación que impide gravemente el goce de los derechos y libertades en pie de igualdad con el hombre».

Esta definición incluye la violencia basada en el sexo, es decir, la violencia dirigida contra la mujer porque es mujer, o que le afecta de forma desproporcionada. Incluye actos que infligen daños o sufrimientos de índole física, metal o sexual, amenazas de cometer actos, coacción y otras formas privación de libertad.

Dos años más tarde, en 1995, tuvo lugar la IV Conferencia Mundial sobre la Condición Jurídica y Social de la Mujer, que abrió un nuevo capítulo en la lucha por la igualdad de sexos, al trasladar el foco de atención de las mujeres al concepto de género.

Desde 1995, en el seno de las Naciones Unidas, se reconoce que la violencia de género se constituye como uno de los principales obstáculos para el abordaje de la libertad, el desarrollo y disfrute de los derechos de la mujer.

España ha tomado como referencia todas estas reflexiones sobre la violencia de género, y en 2004 aprobó, por unanimidad de todos los grupos políticos, la Ley Orgánica de Medidas de Protección Integral contta la Violencia de Género.

Esta ley define la violencia de género como una situación de desigualdad, discriminación y relación de poder de los hombres sobre las mujeres, que se ejerce por si cónyuges o por quienes hayan estado ligados a ellas por relaciones sentimentales, aún sin convivencia, y comprende todo acto de violencia física y psicológica, incluidas las agresiones a la libertad sexual, las amenazas, las coacciones o la privación de libertad arbitraria.